miércoles, 17 de noviembre de 2010

viernes, 12 de noviembre de 2010

Peronismo y la caída de Illia

Después del fracaso del "Operativo Retorno", la vuelta de Perón al país se alejó del horizonte de la política nacional. Simultáneamente, los partidarios del Peronismo sin Perón tomaron un nuevo impulso.

Sin embargo, había pruebas de que el ascendiente de Perón sobre el electorado peronista se mantenía. El 1966 se realizaron elecciones de gobernador en la provincia de Mendoza, en las cuales se pronosticaba el triunfo del candidato apoyado por Vandor. Para evitar la consolidación del dirigente sindical, Perón al país a su esposa, María Estela Martinez, con la misión de respaldar otro candidato pero

nista, opuesto al de Vandor. Además, Perón envió una grabación en la que ordenaba votar por ese candidato, que fue difundida por radio. Después de estas muestras de apoyo, el candidato de Perón derroto a Vandor.

Ante esta derrota buena parte de la dirigencia sindical se embarcó en los planes para el golpe militar.

El golpe de Estado contra Illia fue planeado con mayor anticipación que otros y gozó también de una inusitada publicidad. Militares y empresarios, con la activa participación de dirigentes frondizistas, conspiraron en la organización del golpe, Estos sectores llevaron a

delante una agresiva campaña de prensa para desacreditar al gobierno, al que acusaban de ser lento e inoperante. Hacia mayo de 1966 el frente golpista estaba consolidado. El 28 de junio, Illia fue depuesto por una junta revolucionaria integrada por los comandantes en jefe de las tres armas. A través de sus primeros decretos destituyeron al presidente y al vicepresidente, a los miembros de la Corte Suprema de Justicia, a los gobernadores y a los intendentes electos. También disolvieron el Congreso y las legislaturas provinciales, prohibieron a todos los partidos políticos y confiscaron sus bienes. La junta designo al nuevo presidente al general Juan Carlos Onganía.

La acción del gobierno

A pesar de su debilidad, Illia impulsó algunas iniciáticas conflictivas. Una de las primeras medidas de su gobierno fue la anulación de los contratos petroleros que Frondizi había firmado con empresas extranjeras. Después impulsó una legislación laboral que le granjeó la animadversión empresarial. Ante una medida que ponía en cuestión la estructura del poder sindical, la respuesta del sindicalismo fue la activa participación en el golpe de Estado contra Illia.

En la década de 1960, se afirmó entre los militares de los países latinoamericanos una visión de los problemas mundiales y latinoamericanos conocida como Doctrina de la Seguridad
Nacional. Las fronteras que los militares debían custodiar eran aquellas que dentro de cada país separaban alos comunistas de quienes sostenían valores del mundo occidental. Algunos consideraban comunista a Frondizi y ala política reformista de Illia y llegarían a tildar de comunista los jóvenes que, a mediados de la década comenzaban a usar el pelo y a abandonar las costumbres de sus mayores.

El gobierno de Illía

El nuevo gobierno nació débil. Para comenzar, carecía de votos de los votos propios para consagrar al nuevo presidente electoral. Si la situación institucional del nuevo gobierno no revelaba gran fortaleza, más complicada era su relación con los militares y con las principales organizaciones empresariales y sindicales.
Los militares, hegemonizados por el sector azul miraban con recelo al nuevo gobierno, cuyos lazos mas fuertes habían sido el sector colorado.
Las organizaciones sindicales también ejercieron una implacable oposición. La CGT llevo adelante en 1964 un plan de lucha, cuyos objetivos eran la obtención de mejoras salariales, el control de precios y el levantamiento de la proscripción del peronismo. La demostración de fuerza que implicó este plan no tenía como destinatario exclusivo al gobierno de Illia: también procuraba mostrarle a Perón el peso creciente del liderazgo sindical.
También en 1964 el sindicalismo tomó una iniciativa audaz: intentar traer a Perón de vuelta a la Argentina. Pero esto fue frustrado por el gobierno argentino que, ante la presión militar, reclamó al gobierno brasileño que detuviera el avión en el que viajaba Perón y su comitiva. El avión fue detenido en Rio de Janeiro y obligado a regresar a España.

Una forma de expresión: Rock Nacional


El rock llegó a la Argentina en la década del 50, como reflejo de una explosión musical que se expandía por el mundo. Pero el verdadero rock argentino tardaría una década más en aparecer. Las premisas de los rockeros argentinos se apoyaban en nuevos conceptos éticos y estéticos y esto hizo que las primeras épocas fueron realmente duras: carentes de medios, perseguidos por la policía, ignorados por los productores, incomprendidos por la prensa y el resto de los jóvenes, su radio de acción se vio circunscripto a unos escasos puntos de reunión.

Asesinato Del presidente de los Estados Unidos, John F. Kennedy


Kennedy fue asesinado el 22 de noviembre de 1963. Durante su gobierno, Kennedy había impulsado un programa para mejorar las relaciones con América Latina. Si bien Frondizi había adherido a este programa, su independencia en política exterior con respecto a los Estados Unidos no le agradaba a los militares

El gobierno de Guido: agudización de los enfrentamientos militares


Después de los enfrentamientos. "los azules" quedaron dueños de la situación, y su figura principal, el general Juan Carlos Onganía, asumió el cargo de comandante en jefe del Ejército. Los militares "azules" y sus aliados civiles formaron un partido llamado Frente Nacional y Popular, este partido buscaba capturar los votos del peronismo, pero sin la figura de Perón. Este intento de peronismo sin Perón enfrento variadas y eficaces resistencias. Debido a estas presiones el frente promovido por los "azules" fracasó. Asi, se mantuvo la proscripción del peronismo, y en las elecciones de 1963 se impusó ineperadamente la fórmula de la UCRP, Arturo Illía- Carlos Perette, con 25,8% de los votos.

La caída de Frondizi

A partir de 1962, la situación política de Frondizi era difícil. Los militares habían acentuado sus presiones, el peronismo había fortalecido su representación sindical y política en la mayoría de las provincias, mientras el resto de los partidos continuaba rechazando al gobierno.

Si bien en 1958 Frondizi había triunfado con el voto del peronismo y durante su primer año de gobierno había procurado incorporar a los trabajadores en su proyecto, en 1962 decidió convertir a su partido en la primera fuerza del antiperonismo.

De acuerdo con esta nueva orientación, el gobierno autorizó la participación electoral de un conjunto de partidos peronistas y neoperonistas, aunque mantuvo la proscripción de Perón. En las elecciones del 18 de marzo de 1962 los partidos neoperonistas ganaron las elecciones en varias provincias. Pero ante la presión militar el gobierno anuló las elecciones en las cuales había triunfado los partidos neoperonistas y Frondizi fue derrocado el 29 de marzo y confinado ala isla Martin García.

jueves, 11 de noviembre de 2010

Planteos militares


La relación con los militares fue el principal problema que debió enfrentar Frondizi. En un comienzo, el sector más antiperonista de las Fuerzas Armadas intento que Frondizi no asumiera la Presidencia, y apenas este asumió, se dedico a conspirar activamente contra un presidente que había llegado al gobierno por los votos peronistas.

Para los altos jefes militares Frondizi debía ser vigilado, no sólo en aquellos asuntos ligados directamente con el funcionamiento de las Fuerzas Armadas, sino también en otras áreas de gobierno como la política económica o las relaciones exteriores.

Además, los militares desconfiaban del estilo audaz e impredecible de Frondizi, consideraban que en el fondo Frondizi era un comunista. Pero, sobre todo, los oficiales de las Fuerzas Armadas no se resignaban a abandonar su papel protagónico en la vida política. Durante su mandato, Frondizi fue objeto de más de treinta “planteos” militares, que no eran otra cosa que presiones para que el presidente adoptara una decisión que algún sector militar consideraba conveniente.

Uno de los últimos y mas importantes planteos militares se produjo a propósito de la Revolución Cubana. El derrocamiento del dictador Fulgencio Batista en 1959 fue bien recibido por todo el continente. La simpatía se disipó bruscamente cuando el nuevo gobierno proclamo su adhesión al marxismo-leninismo y se alineó con la Unión Soviética. La reacción de los Estados Unidos fue de abierta hostilidad, compartida por los jefes militares de todo el continente, que veían confirmados sus mas profundos temores con respecto al avance del comunismo.

La política exterior de Frondizi procuraba mantener un cierto margen de independencia frente a la política norteamericana. Además, Frondizi pensaba que los principales conflictos internacionales de las naciones periféricas debían entenderse como resultado del intento de esas naciones para salir del subdesarrollo, y no como manifestaciones locales del enfrentamiento entre los Estados Unidos y la Unión Soviética.

En el contexto del progresivo endurecimiento de los Estados Unidos frente a Cuba, Frondizi llevó a cabo una audaz maniobra. En agosto de 1961 mantuvo una reunión secreta en la residencia de Olivos con unos de los dirigentes de la Revolución Cubana; el guerrillero argentino Ernesto “Che” Guevara, con el objetivo de mediar extraoficialmente entre los Estados Unidos y Cuba. Pero no tuvo éxito en este intento, y la filtración de la noticia de la entrevista provocó una nueva escalada de planteos militares que a punto estuvieron de culminar con el derrocamiento del presidente.

Ché en Punta del Este

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Una democracia a medias

Entre 1958 y 1966, el país tuvo una democracia a medias, pues uno de los partidos políticos, el peronismo, estaba proscripto para participar en las elecciones presidenciales, y su líder, Perón, debía permanecer en el exilio. Además durante ese tiempo, los militares ajercieron una intervención permanente, a veces en forma abierta y otras veces más disimulada.

Para las Fuerzas Armadas, la posibilidad del retorno del peronismo al poder era inaceptable. Al mismo tiempo, las expectativas de desperonizacion de la clase obrera habían fracasado, e incluso algunos jefes militares consideraban esto como una seña favorable, en la medida en que la identidad peronista de los trabajadores era un reaseguro frente al comienzo, que para los militares constituía la peor amenaza.

Para Perón, por su parte, esta situación resultaba muy complicada. Se había producido la apertura de ciertos espacios de legalidad política para el peronismo a través de la autorización a partidos denominados “neoperonistas”. Estos partidos eran de alcance provincial y estaban encabezados por antiguos dirigentes del ala política del peronismo. Para controlar esta situación, la estrategia de Perón desde su exilio consistió en impedir que cualquiera de los sectores peronistas predominara claramente y en evitar, al mismo tiempo, la fuga de dirigentes hacia el gobierno de turno.





martes, 9 de noviembre de 2010

Elecciones constituyentes y elecciones nacionales

El gobierno surgido en la Revolución Libertadora tenía carácter provisional: su principal tarea era conducir al gobierno hasta las elecciones nacionales.
En 1965 se produjo la división de la Unión Cívica Radical entre los seguidores de Arturo Frondizi, que formaron la Unión Cívica Radical Intransigente (UCRI) y la que se denominó Unión Cívina Radical del Pueblo (UCRP). En las elecciones para constituyentes, el voto en blanco (según las directivas de Perón) se ubicó en primer lugar con el 25% de los votos. La UCRP se ubicó en segundo lugar, seguida por la UCRI.

Teniendo en cuenta estos datos, Arturo Frondizi, candidato a presidente por la UCRI, propuso a Perón un pacto por el cual el peronismo votaría la fórmula de los intransigentes a cambio de la promesa de normalización de la CGT y de la legalización del peronismo cuando Frondizi ocupara la presidencia. El acuerdo le permitía a Perón tener un papel muy importante en la política argentina, que hubiese sido inimaginable tres años atrás; para Frondizi, era la posibilidad del triunfo electoral. Las negociaciones del pacto fueron secretas pero sus resultados públicos. Gracias a este apoyo la fórmula Arturo Frondizi - Alejandro Gómez se impuso ampliamente en las elecciones de febrero de 1958 con 4.049.230 votos.

El antiperonismo al mando

Como en la mayor parte de los frentes que organizaron el golpes de Estado en la historia de nuestro país, los acuerdos entre los distintos sectores eran muy limitados: todos coincidían en el rechazo de Perón, pero difería en sus otros objetivos. El presidente de facto Eduardo Lonardi, que tenia afinidad con el nacionalismo católico, establecía una distinción tajante entre Perón y el peronismo, concentrando su crítica para el primero y reservando una actitud abierta y de colaboración para con el segundo. En noviembre de 1955, a causa de las diferencia en gobierno, Lonardi fue desplazado y asumió la Presidencia el general Pedro Eugenio Aramburu.

Con Aramburu y el vicepresidente, Isaac Rojas, los sectores decididamente antiperonista tomaron el control del Estado. Sus primeras medidas no dejaron dudas sobre esta orientación: Intervinieron la CGT, prohibieron la publicación de los nombres de Perón y Eva Perón y de cualquier imagen, símbolo o palabras que fuera expresión de su Movimiento, y declararon la ilegalidad del Partido peronista.

Mientras tanto, Perón (exiliado) procuraba mantener su liderazgo entre sus confundidos y dispersos partidarios, que habían organizado en la Argentina una organización clandestina llamada “la resistencia”. En Junio de 1956, algunos militares peronistas ( sin el apoyo de Perón) se alzaron contra el gobierno. La fracasada intentona, encabezada por el general Juan José Valle fue reprimida con una severidad inusitada, sin precedentes en el siglo: el gobierno aplico la ley marial e hizo ejecutar a 18 militares y 9 civiles que habían formado parte del Movimiento.

El General



Principalmente comencemos por el principio. ¿No es asi? Esta historia comienza con la presidencia de Juan Domingo Perón que fue un político, militar y presidente argentino.

Ha sido el único Presidente de la Nación Argentina en ser elegido democráticamente en tres ocasiones; la primera, en las elecciones del 24 de febrero de 1946, para el periodo19461952; la segunda, al ser reelegido en las elecciones del 11 de noviembre de 1951 para el período 19521958, que no alcanzó a completar debido al golpe militar que lo derrocó el 16 de septiembre de 1955; finalmente, tras 18 años de exilio, regresó al país y fue elegido por tercera vez presidente el 23 de septiembre de 1973 para el periodo 1973-1979, que no pudo completar a causa de su fallecimiento.

Se destacó por su labor en el Departamento Nacional de Trabajo (luego elevado a la categoría de secretaría de rango ministerial), al que accedió durante la presidencia de facto del General Pedro Pablo Ramírez, y en el cual tomó numerosas medidas que favorecieron a los sectores obreros. Aunque dichas medidas lo hicieron popular entre la clase trabajadora, le granjearon la oposición de numerosos sectores que, dirigidos por el embajador estadounidense Spruille Braden, se nuclearon en un frente antiperonista. En ese período fue designado también Vicepresidente de la Nación y Ministro de Guerra. Perón fue destituido por el conato militar del 8 de octubre de 1945, encabezado por el General Eduardo Ávalos que exige su renuncia de la Secretaría de Trabajo y es encarcelado en la isla Martín García, pero fue liberado luego de una gran movilización obrera a la Plaza de Mayo el 17 de octubrede 1945.





Falleció el 1 de julio de 1974 en ejercicio de su tercera presidencia, sucediéndolo su viuda María Estela Martínez de Perón, quien había sido elegida como vicepresidente.

Nos vamos a concentrar en los finales de su segunda presidencia y en el golpe de estado que llevo a su derrocamiento:

En Junio de 1955, la celebración de Corpus Christi se transformó en una manifestación antigubernamental a la que asistieron mas de 100 mil personas. Dos sacerdotes acusados de haberla organizado, fueron expulsados; por su parte la respuesta del Vaticano fue excomulgar a los miembros del Gobierno Argentino responsables de la medida.

Unos días antes estalló un alzamiento militar que habría involucrado a la Marina. El gobierno pudo sofocar el estallido, pero tras él aumento la violencia. Después de una concentración de la CGT, las iglesias del centro de Buenos Aires fueron incendiadas. Los militares y el clero acabarían por ser el factor aglutinante de todo el espectro opositor.



El 31 de Agosto se produjo una violenta declaración del gobierno en un discurso. Perón afirmo que “ por un muerto peronista habrá cinco de la oposición”.

Es probable que estos acontecimientos decidieron al Ejercito a intervenir. La Marina y el Ejercito se vincularon para hacer efectivo el movimiento contra el gobierno. El 16 de Septiembre tuvo lugar el levantamiento militar. El foco mas importante se encontraba en Córdoba bajo el liderazgo del general Lonardi. En Buenos Aires la Marina, bajo la dirección del almirante Isaac Rojas, amenazó con bombardeos y con el bloqueo del Río de la Plata.

Perón decidió evitar la lucha y el 19 de Septiembre renunció al cargo de Presidente, se refugió en una cañonera paraguaya anclada en el puerto y abandonó la escena política.

Comencemos...

Cuando recordamos la dictadura militar que vivimos en la Argentina, pensamos en los desaparecidos, la plata dulce, la guerra de Malvinas, etc. Estos hechos y muchos más fueron piezas de un macabro rompecabezas destinado a reformar, o reorganizar a la Argentina, para volver a convertirla en un país agro-exportador con participación política restringida a una élite. Los hechos destacados anteriormente son los resultados de las medidas tomadas para convertir a este país altamente movilizado y con el ingreso muy distribuido en una granja productora de materias primas de riqueza concentrada.